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INT. PISO GALÍNDEZ. LIVING -- DIA
NUEVA YORK 1956
Nos encontramos en un piso oficina, más oficina que piso. Los libros,
carpetas, ficheros y papeles desbordan su espacio lógico y ocupan casi hasta
la cocina y el dormitorio, otras únicas dependencias de la casa. Apenas hay
detalles que delaten la personalidad de su ocupante. Dos fotos en blanco y
negro enmarcadas. Una de un hombre alto y delgado (GALÍNDEZ) acompañando al
lehendakari Aguirre junto a otras dos personas y otra de un valle frondoso y
empapado de lluvia y nubes. Una pequeña ikurriña es el único elemento
atípico del piso.
Hay una terraza abierta. Allí hay dos personas.
EXT. PISO GALÍNDEZ. TERRAZA -- DIA
La terraza da a la 5ª Avenida de Nueva York. Estas dos personas visten a la
moda de mediados de los años 50. Están acodados en la barandilla,
contemplando la calle y tomando café. Uno de ellos es el hombre de la foto,
Galíndez. Parece serio y abatido. El otro es un hombre delgadito y
presumido, repeinado y con un fino bigote, lleno de viveza e ironía (DON
ANGELITO). Su traje cruzado, inmaculado y lleno de color contrasta con la
ropa gris del desgarbado Galíndez. Echa un poco de brandy a los cafés.
DON ANGELITO
(EN CASTELLANO, CON ACENTO CARIBEÑO)
Anímese, hombre. En los momentos de derrota es cuando uno se da de narices
con las grandes verdades. Yo, por ejemplo, ¿qué descubrí allá en su guerra
civil? El carajillo. El mejor tónico del mundo.
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